
Con ‘Tostao’, su pareja, y ‘Slow’, su hermano, se completa el trío de chocoanos que tienen a Colombia bailando al ritmo de un Pacífico bullicioso y sensual.
¿Por qué la llaman ‘Goyo’?
Mi papá tenía un cuarto donde coleccionaba LP de todo tipo y a mí me gustaba poner música. Me encantaba una canción del Gran Combo que se llama Goyito Sabater y mi mamá me la ponía cuando no quería ir al colegio, porque sabía que con ella me despertaba y así me quedé.
¿Alguien le dice Gloria?
Sólo un primo que me llama por el nombre completo: Gloria Emilse.
¿De dónde viene ‘Goyo’?
De Condoto (Chocó), de una familia común y corriente. De los Martínez: madereros y artistas, y de los Perea: cantantes.
Lo que más le gusta de un día normal en Condoto.
La tranquilidad de la calle y la posibilidad de ir al río a bañarnos, ese río que es fuente de inspiración para muchos artistas del Chocó.
‘A mi tierra llego un fulano / llevándose todo mi oro’, dice una de sus letras. ¿Ese es el retrato de su pueblo?
Desde que tengo uso de razón recuerdo a mi abuela bajando a la mina. Compusimos Oro porque veíamos que mucha gente joven, como nosotros, sabe que se explora el oro del Chocó, pero no ven sus consecuencias.
¿Qué trae de especial el color de la piel?
Trae una historia ancestral de esclavitud, tambores, voluptuosidad y alegría.
¿Tres palabras que describan el estilo de ChocQuibTown?
Urbano, alternativo y colombiano.
¿Cómo nació el grupo?
Me fui para Cali a estudiar Psicología y me encontré con Tostao, a quien conocía desde los 13 años. Empezamos a hablar de ideas similares que teníamos, de la intención de rescatar los sonidos del Pacífico y fusionarlos con ritmos urbanos. Así vinieron las primeras composiciones en la calle y en los buses. En 2000 Slow ya formaba parte de nosotros, comenzamos a tocar las puertas de los productores, pero no entendían nuestro estilo: que teníamos que cambiar el nombre porque era impronunciable, que por qué yo me hacía llamar como un hombre, que teníamos un acento muy chocoano y que no sonábamos comercial. Un día Slow decidió que él sería el productor, mi mamá nos donó un computador y comenzamos a hacer música en la casa.
¿Y qué fue lo primero que resultó?
La versión que hicimos de San Antonio, una canción tradicional del Chocó. Y luego vino Somos Pacífico.
¿Cómo llegaron a Bogotá?
Un día Tostao me dijo: “Goyo, el que sale en Bogotá a vender piedras, vende”, así que nos vinimos. Trabajé con el grupo y al tiempo terminé mi carrera, fue una gran etapa, me invitaron a cantar con Sidestepper y al mismo tiempo avanzaba ChocQuibTown.
¿Lograron darle voz al Pacífico?
El Pacífico tenía muchas ganas de oírse. El proceso no lo hemos hecho solos, Jairo Varela y el Grupo Guayacán sembraron frutos que ahora recogemos; asimismo, nosotros estamos dejándoles un legado a los que vienen y ganarnos el Grammy Latino fue importante.
¿Qué les trajo el premio?
Felicidad, reconocimiento y creer un poquito más en la música.
¿Qué tan útiles han sido las redes sociales para ChocQuibTown?
Son nuestro principal canal de promoción, nuestro medio y aliado, estamos pasando por un buen momento, donde muchos están atentos a lo que hacemos y nos gusta sentir cerca a la gente.
El mejor escenario para un concierto.
Cualquiera con público y buen sonido.
¿Qué artista colombiano la ha influido?
Shakira, ella sabe que lo que importa no es que uno sea de Barranquilla, Chocó o Bogotá, lo importante es soñar.
¿Volvería a vivir en Chocó?
Claro, me da muy duro no tener agua potable, eso no es fácil. De resto, me aguanto lo que sea. Pero volvería a Condoto porque Quibdó es muy caótico para mí.
¿Por qué Colombia no es una potencia musical?
Porque aún no nos creemos el cuento de que es posible. Si nos convenciéramos… ni Brasil nos alcanzaría.
¿Qué la hace feliz?
Los guitarreos en Condoto: llega alguien del pueblo y se sienta con una guitarra y alrededor nos reunimos todos a cantar. Ese es un espacio bonito.
¿Cuándo decidió ser cantante?
No pensaba serlo, pero cantaba. Me iba volada para los conciertos de mi mamá y en 5º de escuela canté a dúo con ella Ritmo Tambó y Flores de Celia Cruz, fue la primera vez que recibí, y de ella, una lección de cómo cantar a dos voces.
¿Le ha tocado alguna vez un ‘pescao envenenao’?
Muchos. Cuando llega un político a decirnos que cantemos en su tarima porque también somos líderes y podemos unirnos… puro pescao, cuando aparecen algunos que dicen que te impulsarán hasta que seas el más famoso…. puro pescao, hasta cuando en la tienda me entregan el yogurt vencido…
¿Cómo hierve un ritmo tan urbano en una zona del país en la que no existen grandes ciudades?
Es que estamos influenciados por Buenaventura, donde ocurre algo mágico. Esa es una ciudad violenta y olvidada, pero por su puerto entran muchas cosas que venían de otras partes, llegó mucha música en inglés, videos de hip hop, merengue, rock, pop, rap… yo me acuerdo que ‘Tostao’ salía a los ocho años en ‘Tele cherne’ rapeando –así le decíamos todos al canal local, el cherne es un pescado seco-. Además muchos teníamos familiares que trabajaban en Panamá y nos traían música y videos que grababan de canales gringos como el Black Entertainment Television. Buenaventura es un Estados Unidos chiquito, hasta se habla en spanglish.
ASOMECOS AFRO.