Se llevaron 3 contratos de Gobernación con ICM, mencionada en ‘carrusel’ y uno con Manuel Sánchez.
En una diligencia de cerca de 5 horas, 20 funcionarios de la Fiscalía General inspeccionaron el despacho de Álvaro Cruz, gobernador de Cundinamarca investigado por su presunta participación en el ‘carrusel’ de contratos de Bogotá.
EL TIEMPO estableció que los investigadores se llevaron copia de varios computadores, incluido el del gobernador, el de la secretaría privada y los de la unidad de contratación. Además, que iban por varios documentos específicos.
Por ejemplo, pidieron copia de los contratos suscritos entre la Gobernación y varios de los 116 municipios, con las empresas ICM e Incoasfaltos, ambas ligadas a los cuñados de Álvaro Cruz y mencionadas por los tres ‘cerebros’ del saqueo a Bogotá -Manuel Sánchez, Julio Gómez y Emilio Tapia- como parte del ‘carrusel’.
Este diario estableció que se trata de tres contratos por 18.000 millones de pesos firmados en el 2011 para obras de infraestructura relacionadas con la ola invernal.
La Fiscalía también exigió copia de los contratos suscritos entre la Gobernación y Marcelino Sánchez Castro, hermano de Manuel Sánchez. Además, el contrato de consultoría, con el propio Manuel Sánchez tuvo durante la administración de Andrés González.
Este último contrato, por 85 millones de pesos, tenía como objeto asesor a la Gobernación en la venta de un lote en la calle 26 con carrera 68.
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